Ha llegado octubre señoras y señores. ¿Cuándo? ¿Cómo? ¿Por qué ayer estaba tomando el sol y hoy veo decoraciones con forma de calabaza en todas las tiendas a las que entro porque llueve y no he sacado paraguas? No lo sé. Pero sí se que con los cambios de temperatura a mí el cuerpo se me vuelve medio loco y que necesito prestarle más atención. Entre otras cosas a los labios, siguiendo dos pasos fundamentales: exfoliación e hidratación. Como de hidratación os he hablado mil veces por Instagram (por el que podéis pasaros siempre que queráis, claro está)hoy os traigo la comparación de los dos exfoliantes labiales que he usado.
El primero de ellos ya asumo que lo conoce absolutamente todo el mundo dado que la fama que cogió así de repente no fue pequeña. Por supuesto, os estoy hablando del exfoliante de sandia del Mercadona. Contiene 4 gr. de producto y creo que recordad que su precio fueron 3€. Como puntos a favor tengo que destacar sí o sí el olor que tiene, que nunca se va y siempre huele como la primera vez que lo abres. Otro aspecto bueno que le veo (puede sonar raro pero luego lo entenderéis) es el packaging, paquete, envase, etc. y es que a pesar de ser de plástico no extremadamente bueno, sigue cerrando perfectamente. Como puntos negativos, diré que el tinte rosa que deja en los labios no lo entiendo. Se que ahora hay uno verde y no se si eso habrá cambiado, pero debo reconocer que me molestaba bastante, sobre todo porque sentía que tenía que estar media hora frotando. Otra de las cosas que cambiaría es que es demasiado suave para mi. Tenía que tirar de ayuda exterior para llevar a cabo la exfoliación y ni así conseguía el resultado perfecto. ¿Lo volveré a comprar? Sinceramente, lo dudo mucho.
Ahora, mi descubrimiento y nuevo amor, el exfoliante labial de miel de Sephora. Amiga. Esto sí. Cuesta 4.95€ y trae 3.5 gr. de producto. Y qué 3.5 gramos. Este sí que exfolia realmente todo lo que necesito y también huele que alimenta (y sabe bien). Además, quieras que no, eso de que este hecho de miel (o eso tengo entendido), como que gusta. Lo único que me descoloca es el envase, por qué es de cartón por fuera y metal por dentro, lo cual no tiene mucha lógica para un producto que vas a usar mayormente en el baño (¿ahora lo entendéis no?), pero se lo perdono. Se lo perdono todo.
Creo que ha quedado bastante claro cual es mi favorito, pero también os digo que sí no necesitáis un exfoliante "fuerte", creo que el de Sephora os puede llegar a hacer daño, por lo que me decantaría por el de Mercadona.
¡Feliz día!
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